Hola soy Cindy, tengo 35 años, 7 años y medio de feliz matrimonio, una niña de 5.6 años y 34 semanas de embarazo de mi niño (Yep! Toda lo que va de pandemia ).
Primero que nada me gustaría contarles algo importante acerca de mi; a mis 22 años tuve mi primer miomectomía (procedimiento quirúrgico para extirpar fibromas uterinos comúnmente llamados “miomas”) en la cuál me extirparon 6 miomas de entre 3cm y 5cm, a mis 28 años justo antes de casarme tuve una segunda miomectomía en la que me quitaron 15 miomas entre 3cm y 6cm; como se podrán dar cuenta literal soy una máquina generadora de miomas.
Desde mis 22 años supe que no podría tener hijos por parto natural, solo vía cesárea e hice las pases con eso, también supe que mis embarazos serían de alto riesgo y que máximo podría tener 2 embarazos. Gracias a Dios a mis 29 años me embaracé y a pesar de ser un embarazo de alto riesgo todo estuvo perfecto, mi Emma nació a las 37 semanas y llegó a cambiarnos la vida por completo! A pesar de ser una niña 100% planeada y esperada, uno nunca está preparada para todo lo que se viene con la maternidad, pero de una cosa estábamos seguros mi esposo y yo, el disfrutarla al máximo y darle realmente todo nuestro tiempo y atención por lo menos por 4 años antes de pensar en otro bebé.
El tiempo se pasó volando y se llegó el día de plantearnos si queríamos tener otro bebé, hace 1 año y un par de meses decidimos buscarlo, 6 meses en el intento y se viene una pandemia sin precedentes que nos obliga a encerrarnos y al mismo tiempo a cuestionarnos una infinidad de cosas… Recuerdo perfecto a un par de semanas entrada la pandemia estar platicando con mi esposo sobre todo lo que estaba sucediendo en el mundo y lo bendecidos que hemos sido, en ese momento decidimos que hasta ahí llegaba nuestra búsqueda por el segundo bebé, nos sabíamos muy afortunados de tener una niña hermosa y sana, nuestro milagro de vida. Considerando la situación mundial e influenciados por la incertidumbre decidimos que ya no era el mejor momento para traer un bebé al mundo y que nuestra familia ya estaba completa!
Lo que mi esposo y yo no sabíamos en ese momento es que una semana después de nuestra plática, íbamos a estar brincando y gritando de emoción al enterarnos que seríamos papás por segunda vez; es increíble como los tiempos de Dios son perfectos en verdad nuestra familia ya estaba completa cuando tuvimos esa plática por que nuestro segundo hijo ya se estaba formando dentro de mi.
Y así empieza una nueva etapa en nuestras vidas con una de las ilusiones más grandes en uno de los momentos más difíciles que vive el mundo… Me enteré de mi embarazo el día 15 de mayo y en mi cabeza lo primero que hice fue hacer cuentas, para finales de año esto ya no será un problema, esto para el verano estará totalmente controlado y obvio podré tener mi baby shower y visitas en el hospital cuando llegue este bebé! Oh sorpresa, va a nacer en el momento más intenso y preocupante de la pandemia!
Lo difícil de vivir un embarazo en pandemia sin duda ha sido el no poder compartir con todos mis seres queridos el proceso, el no poder tener un baby shower en el que todo mundo me sobara mi panza jajaja, el que mis amigas prácticamente no me han visto panzona salvo por las fotos, pero sin duda lo más difícil y pesado ha sido la incertidumbre, el nervio y el miedo de contagiarte, el solo hecho de ser parte del grupo vulnerable es preocupante y obvio los protocolos y cuidados se extreman, el que tu esposo no pueda entrar contigo a las citas (gracias a Dios me atiendo en Tijuana y San Diego, en Tijuana si puede entrar pero en San Diego no, hasta el día del parto)… En la semana 12 viví él peor susto, una amenaza de aborto justo en mi cita con el doctor en San Diego y nunca me había sentido tan sola y aterrada, el no tener a nadie conmigo en ese momento, por primera vez desde que empezó la pandemia LA ODIÉ CON TODAS MIS FUERZAS, de no haber pandemia mi esposo hubiera estado conmigo tomándome de la mano y abrazándome, diciéndome que todo iba a estar bien; sin embargo las palabras de aliento solo fueron por mensaje mientras me revisaban el me esperaba en el carro afuera del hospital (no me quiero ni imaginar lo preocupado y asustado que estaba).
Después de mi amenaza de aborto estuve en reposo total por casí 3 semanas, las semanas más largas de mi vida, sin poder recibir visitas, pero con la mejor actitud para que mi bebé se aferrara a mi como yo a él! GRACIAS A DIOS aquí estamos a 3 semanas de recibirlo y tenerlo en nuestros brazos.
Pero no todo ha sido malo, el estar embarazada en pandemia ha tenido tantas cosas buenas para mi, un bonding increíble con el bebé dentro de mi, he generando una gran consciencia de los cambios que ha vivido mi cuerpo durante el embarazo, un desacelere en mis actividades que ha hecho que descanse y disfrute muchísimo tanto mi embarazo como a mi hija, saberme con todo el apoyo y amor de mi esposo, el tenerlo en casa todo este tiempo nos ha unido todavía más como pareja y familia! El miedo y nervio de contagio solo fue al principio, luego entendí que si yo me cuido y protejo, así como a mi familia no tengo nada que temer, ahora solo queda disfrutar de las últimas semanas siendo 3 y prepararnos para ser una familia completa muy pronto! Sobra decir que obviamente no tendremos visitas en el hospital y mucho menos en casa, pero al mismo tiempo lo veo como un momento especial en el que mamá, papá y bebé tendremos nuestro momento de solo 3 para regresar a casa y ser 4.
Si estás embarazada en este momento, no dejes que esta pandemia te nuble tu ilusión, cuidándote y siguiendo todas las indicaciones de tu doctor, todo estará perfecto! Mi mejor consejo es que disfrutes el momento y aproveches todo ese tiempo sin distracciones y aceleres para estar presente y consciente de la vida que se está formando dentro de ti! YOUGOT THIS MOM sin duda el dar vida en plena pandemia es un gran regalo de Dios y tú eres el vehículo para que suceda!
Gracias a todas por leerme y sobre todo a ti Lily por invitarme a escribir este MOM TALE.
Un abrazo! Cindy Verdugo. @ladymalinche